martes, 26 de marzo de 2013

Vacuna de Leishmaniosis canina


Desde principios del 2012 y tras más de 20 años en desarrollo ya está comercializada la vacuna frente a la Leishmaniosis. Como aún son bastantes las dudas que nos plantean en consulta sobre esta vacuna, vamos a intentar responder a las más frecuentes.

Antes de vacunar al perro tomaremos una muestra de su sangre y le realizaremos una prueba específica para asegurarnos de que esté libre de Leishmania.

La primera vez que vacunamos a nuestro perro  tenemos  que poner 3 dosis de forma subcutánea, con un intervalo entre vacunas de 3 semanas para conseguir alcanzar una inmunidad óptima.

La revacunación es anual: los siguientes años aplicaremos una única dosis de recuerdo a nuestra mascota.

Los efectos secundarios  de esta vacuna son los equivalentes a cualquier otra vacuna: dolor e inflamación en la zona de inyección (el día de la vacunación podemos aplicar frío localmente, y calor en días posteriores), fiebre, hipotensión, y en casos muy raros reacciones anafilácticas (urticaria, inflamación del hocico, ojos,…). Esta vacuna no puede producir la leishmaniosis en el perro que estamos vacunando puesto que no incluye el parásito, sino una proteína que produce la leishmania y que es la que estimula las defensas en el animal.

A pesar de que la tasa de protección  de esta vacuna es alta, no es del 100%, por lo que es recomendable que durante los meses de primavera-verano, se continúen utilizando los collares o pipetas repelentes de mosquitos para reforzar la protección del perro.

Si tienes más dudas sobre la vacunación de tu perro, consulta a tu veterinario.

No hay comentarios:

Publicar un comentario